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¿Acabar una relación? Sí, pero con dignidad

Qué más quisiéramos que nuestra relación fuera duradera con la persona que creemos amar, sin embargo nada es perfecto y estas terminan cuando menos lo esperamos, pero si en tus manos está darle fin a la relación, hazlo de manera que no hayan daños y menos que queden rencores.

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Las relaciones de pareja de larga data terminan por muchas razones, las que incluso pueden no ser tan claras o comprensibles para ambas partes. Así lo afirma la doctora en psicología Marcia Reynolds en una columna del portal especializado Psychology Today, quien agrega que aunque sea así, debes tener en cuenta que los rencores y la culpa destruyen los buenos recuerdos. “Las malas rupturas podrían terminar como un equipaje que afecta tus relaciones futuras”, explica.

La especialista dice que si estás considerando terminar una relación importante, hay maneras de hacerlo que pueden limitar el daño colateral. “Además de mi propia formación (y rupturas personales), he recopilado ideas de varios otros artículos de psicólogos expertos construcción de relaciones saludables”, dice la especialista.

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1. Estar seguro de que realmente deseas terminar la relación: No amenaces con terminar sólo para que tu pareja cambie. “Asegúrate de que realmente hay una falta de amor, respeto, o alegría, ya que eso no puede ser revivido. Si todavía hay esperanza, obtén asesoramiento para determinar si hay una manera de salvar la relación. Es mejor sentirse seguro en lugar de tomar la decisión enojado”, recomienda Marcia.


Lo importante es ser honesto contigo mismo y tu pareja al respecto, expresar lo que sientes y los cambios por los que ha atravesado la relación. “Sabemos que compartir sentimientos negativos puede ser riesgoso. Tu pareja puede ponerse a la defensiva. Pero si es muy complejo puedes recurrir a un consejero o terapeuta de parejas para ayudar a facilitar la conversación. Terminé mi última relación con la ayuda de un terapeuta. Nos despedimos con tristeza después de dos meses de consejería, pero ninguno de nosotros se sintió deshecho. Y después de un año de sanación, fuimos capaces de hablar de nuevo, como amigos” reveló.

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2. No mates la relación antes de finalizarla: “La culpa, la crítica, las acusaciones, las quejas, y los secretos pueden conseguir tu objetivo final de que la relación acabe, pero el proceso será innecesariamente doloroso. No busques culpar a tu pareja en un esfuerzo por cubrir tu propia culpa. Asumir la responsabilidad es tu elección. Identifica lo que quieres de una pareja, y de tu vida. Si estás seguro de que no puedes encontrar eso en tu relación actual, fija una fecha para terminar”, dice Marcia.

La especialista afirma que muchas relaciones perduran durante años después de que la energía se drenó y después de esta lenta erosión, algo sucede y uno de los dos se da cuenta de lo infeliz que se siente. “Normalmente se puede trazar un camino de acusaciones, falta de respeto y negligencia que condujeron a esta revelación. Trata de reconocer estos signos y habla de ellos antes de ‘matar’ la relación. Una vez que se pierde el respeto, es improbable que la relación pueda ser revivida”.

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3. Perdona: Si vas a terminar, perdona a tu pareja por ser humano y perdónate por haber elegido salir de ahí. Si lo haces, es posible que el quiebre cause menos daño.

“No te vayas o alejes sin que se dé cuenta, a menos que temas una reacción violenta. Elije un lugar privado para compartir tu decisión con tu pareja. Luego, prepárate para mantener la calma si la respuesta es la ira o un comportamiento manipulador”, aconseja la terapeuta.

Es probable que tu pareja lo sospeche, pero aun así podría haber una reacción emocional. “No trates de calmar a tu pareja mintiendo, sé honesto. Responde las preguntas con amabilidad y discúlpate por el dolor causado. Luego pregunta cuándo puedes encontrar el tiempo para desentrañar asuntos como la propiedad o los gastos que compartían“, añade la psicóloga.

Debes estar consciente de que probablemente no serán amigos, pero trata de mostrar respeto a la persona a la que alguna vez amaste y que puede que aún te amé profundamente, dice Marcia.

“Una vez que haya comenzado el proceso de separación, establece tus límites: Si has explicado sus razones para irte, no tienes que hacerlo de nuevo. Es posible establecer una amistad más tarde, pero necesitas tiempo para establecer confianza en una vida aparte. Además, puede que tengas que encontrar maneras de lidiar con la soledad que no sea recurrir a tu ex”, afirmó.

“Finalmente, pregúntate lo que has aprendido de la experiencia”, concluye.

Tomado de Informe21

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Sobre el autor

Uriel Ardila

Redactor Vibra.

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