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¿Perdonarías al hombre que abandonó su hogar?

La publicación de esta mujer se volvió viral, no por la historia que ella nos cuenta, sino porque su hija de 11 años le dio una lección que le cambió su perspectiva errónea del perdón.

¿Perdonarías al hombre que abandonó su hogar?¿Perdonarías al hombre que abandonó su hogar?

Aunque equivocarse sea de humanos, la verdad es que para nosotros “es difícil perdonar” cualquier cosa, por lo que implica, olvidar, superar y reparar el corazón.

Ahora, perdonar no lo hace cualquiera y por lo general cuando lo hacemos es por lo que aprendemos de otras personas como en este caso le sucedió a una madre soltera, la que compartió su experiencia en las redes sociales.

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La pequeña de gran corazón y lleno de bondad, perdonó a su padre luego de ser abandonada y su mami nos cuenta detalles del suceso:


“Mi hija no ha visto a su padre desde que tenía 4 años, su padre decidió abandonarnos. A los días de abandonarnos, él me pidió que quería renunciar a sus derechos de padre para dejar de pagar manutención y sin más, yo acepté, lo último que quería era que mi hija sufriera por un padre ausente y que no la quería, además él no quería tener ningún otro tipo de responsabilidad con ella y yo no pensé nunca en forzarlo. Decidí nunca mentirle sobre él. Conforme fue creciendo fue sintiendo la necesidad de él. Todas sus dudas e inquietudes las respondí de la mejor manera posible de acuerdo a su edad para no herirla y decepcionarla aún más.
Hace tiempo, de manera inesperada me contactó, arrepentido me pidió mi ayuda pues quería recuperar un poco del tiempo perdido con nuestra hija pues había sido diagnosticado con cáncer y no le quedaba mucho tiempo de vida, según él.
Acepté el plan, finalmente era su padre así que acudimos al parque en donde habíamos quedado, me pidió dos horas con ella pero finalmente solo estuvo 20 minutos a su lado.
Después de ese día no volvimos a saber de él hasta hace unas semanas en que topamos con unos amigos de él quienes hicieron el comentario de que mi hija tenía cierto parecido con los hijos que él tenía. Continuaron diciendo que finalmente se había establecido, se casó y formó una familia. Logré contener las lágrimas, no se precisamente cual fue el sentimiento pero sin pensarlo me despedí y me llevé a mi hija de ahí. Ella sonriendo me miró y me dijo: -Mamá, estoy feliz por él y sus hijos porque finalmente aprendió a ser un buen padre, deseo que él sea feliz, eso sería algo muy bueno.
Sus palabras me regresaron el alma al cuerpo y entonces una pequeña de once años me dio una gran lección: a perdonar de corazón”.

Perdonar viene desde el fondo de tu alma, recuerda que todos podemos equivocarnos y también todos merecemos una segunda oportunidad.

Comparte y apoya el mensaje de esta pequeñita que tiene un gran corazón.

Tomado de NoSeMeOcurrió

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Sobre el autor

Uriel Ardila

Redactor Vibra.

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